Ruta de Las Brañas Vaqueiras de Teverga

 

   En el concejo de Teverga tenemos la fascinante posibilidad de realizar diversas rutas para conocer y disfrutar antiguas brañas de montaña, algunas excelentemente conservadas. En esta ocasión la propuesta es “un recorrido por las brañas en las que pernoctaban los vaqueiros en su trashumancia estacional, que aún conservan construcciones tradicionales, como cabañas, teitos y corros”.

   Desde Oviedo a través de la autopista A-63 en dirección Grado-La Espina nos desviamos por la salida 9 hacia Trubia para coger la AS-228 que circula cerca de Villanueva de Santo Adriano, cruza Proaza, Entrago y San Martin, capital del concejo de Teverga, donde a través de la AS-265 ascendemos al Puerto de San Lorenzo.

   Esta ruta de “Las Brañas Vaqueiras PR-AS 176” se inicia en la Braña de Tuiza, muy cerca de una pronunciada curva de la carretera AS-265, a dos kilómetros de coronar el Puerto de San Lorenzo, donde en esta ocasión dejé el coche aparcado para luego bajar hasta la Braña de Tuiza caminando.

   Desde el asfalto de la carretera una pista de uso ganadero atraviesa un conjunto de cabañas de piedra y techo de teja, para luego cruzar un pequeño arroyo y encontrar la primera fuente, con excelente agua fresca. Poco a poco vamos ganando altura a través de una pista de tierra hasta llegar a la Braña El Tronco donde a la derecha tropezamos con un vistoso teito, rodeado de  maleza.

   Además de pasar entre zonas de pradería ya contemplamos interesantes vistas de un llamativo entorno natural. Al transitar por estos lugares nos viene a la memoria la importante labor de vaqueiros y ganaderos “verdaderos guardianes del paraíso natural que es hoy Asturias”. Ciertamente su continua actividad ganadera durante siglos ha sido fundamental para conservar intacta los lugares y la naturaleza que hoy disfrutamos.

   En las orillas del camino y praderías encontramos numerosas plantas de la llamativa ´hierba de Santiago`- Senecio jacobea, con sus rectos tallos y densas inflorescencias de flores amarillas, conocida por su toxicidad sobre los animales. El ganado vacuno y caballos no la comen aunque pasten a su lado, la detestan por su sabor amargo.

   En una bifurcación tomamos el camino de la izquierda para introducirnos en la amplia Braña de El Rebellón, una de las más importantes y mejor conservadas del concejo, con una vistosa mezcla de cabañas de piedra y teitos. Un placer pasear por estos hermosos lugares.

   En el supuesto de no tener tiempo suficiente para realizar la ruta completa o por ir con niños pequeños o personas mayores, el recorrido hasta este simbólico lugar ya merece la pena, pudiendo regresar por el mismo camino hasta la Braña de Tuiza.

   Con el ánimo de completar el itinerario ascendemos a través de la pradería por una senda entre piornos hasta encontrar de nuevo la pista que nos conduce a la campera o collada de Troméu, dejando atrás la Laguna de La Canalada, a la izquierda. Desde aquí mirando al sur es un placer contemplar el Cordal de La Mesa y Peña Negra.

   Continuamos la senda a través de una amplia pista que nos permite observar un amplio valle por donde transita el río Bayo, rodeado de amplias praderías tendidas. En poco tiempo llegamos a una nueva bifurcación señalizada, el camino de la izquierda nos lleva hasta la Braña de Llamaraxil o Chamaraxil.

   Estamos inmersos en medio de un fantástico entorno natural con típicas construcciones vaqueiras bien conservadas, de nuevo apreciamos teitos, corros y cabañas de teja. Al parecer estamos bien protegidos por el cercano Pico del Cuervo que controla nuestros pasos por la Braña. Desde Chamaraxil se puede subir, a través de un estrecho sendero bordeando el valle, hasta la Braña y Venta de Piedraxueves, en el Camín Real de la Mesa.

   Un refrescante trago de agua en la fuente de Llamaraxil nos sirvió como despedida de la encantadora majada, para luego retornar hasta la desviación y seguir senda arriba hasta llegar a los pastos de la cercana campera La Degollada con su pequeña laguna.

   Desde un potrero ubicado a la izquierda ascendemos a través de una vereda entre frondosos acebales y otros árboles hasta llegar a la fuente del Teixo, con el consiguiente bebedero para el numeroso ganado que pasta y transita por esta zona. La senda es estrecha, a veces con varios ramales, y nos exige caminar con más precaución hasta alcanzar el Collau de Llanu Cimeru.

    Ya se divisa el Puerto de San Lorenzo, y más atrás el Picu La Mirandiella con su antena de telecomunicaciones, desde este Llanu Cimera las vistas son fabulosas. En travesía descendente cruzamos el arroyo de Garamanchón y la propia senda nos lleva hasta la pista de la Calzada de la Mesa o Camín Real. El corto y suave descenso nos muestra Somiedo a un lado y Teverga al otro, hasta llegar al Alto de San Lorenzo.

   Esta ruta de las Brañas Vaqueiras de Teverga, asequible para muchos, es una de los recorridos más utilizados por los amantes y seguidores de esa atractiva mezcla entre naturaleza y cultura.