Para senderistas y entusiastas de la naturaleza y del mundo rural, este sencillo itinerario que transita por los Puertos de Marabio es uno de esos lugares que debemos anotar en la agenda para su visita. Cierto es que la meteorología tiene que ser favorable.
Ubicados en el centro de Asturias, en los concejos de Yernes y Tameza, y Teverga, los Puertos de Marabio se componen de una extensa pradería de media montaña, declarados Monumento Natural dentro del territorio de Paisaje Protegido del Pico Caldoveiro.
Esta amplia zona de pastizales con algunas cabañas de pastores esparcidas y que generan un singular contraste con el entorno, varias de ellas abandonadas, se ha aprovechado como pastos de verano para los rebaños de animales de los pueblos cercanos que suben su ganado en primavera y lo bajan en otoño.
En otro sentido es preciso saber que esta zona está reconocida como una de las más interesantes e importantes desde el punto de vista geomorfológico, debido a la acción erosiva del agua sobre la roca caliza, originando un paisaje kárstico peculiar con dolinas, sumideros y valles ciegos en superficie comunicados entre sí por ríos y cavidades subterráneas.
Para llegar a Marabio o a la Ermita de Santa Ana, punto de referencia importante, tenemos dos opciones, una desde Entrago – Teverga ascendiendo unos 7 km por una empinada y sinuosa carretera pasando por las pequeñas aldeas de Prado, Gradura y Murias. La otra, atravesando el Concejo de Yernes y Tameza, y desde Villabre ascender a Los Puertos.
Si queremos disfrutar de este peculiar y significativo paisaje nada mejor que realizar el recorrido circular de algo más de 8 km que nos indica el PR AS-72, señalado en el mapa, y que tiene su inicio en la citada Ermita de Santa Ana.
Cerca de la Ermita existe una gran cruz y un mirador desde donde se pueden contemplar valles y montañas del concejo de Teverga, es una zona abierta apta para dejar el vehículo estacionado, y con unas amplias vistas del paisaje, con el Picu Caldoveiro al Norte.
A través de un sendero que transita paralelo a la carretera de acceso, pero en sentido contrario, iniciamos el recorrido. Después de un pequeño tramo, la cruzamos para desviarnos a la derecha por una pista de tierra en una zona rodeada de pastos.
Estamos en la parte más complicada de esta ruta, al no existir unos mínimos indicadores. Después de pasar al lado de una fuente con agua potable, la pista finaliza. Al no disponer de señales debemos girar a la izquierda ascendiendo a través de praderías a la parte alta de la colina, ayudándonos con el mapa y buscando referencias visuales. Es un tramo corto y siempre se acierta.
Llegamos a la parte más elevada del itinerario, en la zona conocida como El Michaorio, poco antes de divisar las cabañas de la Braña de La Monxal donde enlazamos con la carretera procedente de la aldea cercana de Villamayor. Son frecuentes en este tramo árboles y/o arbusto de espinos albares y acebos, según los casos, muy comunes en los Puertos de Marabio.
Poco después, en el Alto de Santiago, encontramos una desviación señalizada, por la pista de la izquierda llegaríamos a la Braña de Santa Cristina, donde se ubicaba la desaparecida ermita del mismo nombre, y desde allí a la esplendorosa campa de Cueiro. Aunque nuestro itinerario sigue de frente.
En realidad a partir de ahora transitaremos, durante un trayecto, por el GR 101.1 conocido como “Camín Real Francés” o “Camín de Cueiro a Villanueva de Santo Adriano”, un destacado ramal del Camín Real de La Mesa, una vía de gran importancia que mantuvo su uso original hasta comienzos del siglo XX.
Desde este lugar tenemos el privilegio de contemplar excelentes panorámicas de la zona rural y montañosa de Marabio, empezando por el Picu Caldoveiro a la izquierda, al norte. De frente, hacia el este, vemos el Picu L`Oubiu, el Collau Caduru, el Picu el Cuervu, ….. entre otros. A nuestra espalda, al oeste, la Sierra de la Granda. Los nombres sirven de poco, pero a veces es preciso conocer alguno para orientarse en el mapa.
Siguiendo la ruta establecida, ahora por asfalto, no tardamos en llegar al cruce con la carretera que conduce a Villabre y Yernes. Nuestro camino continúa de frente, ahora cómodamente lo que nos permite visualizar esta amplia zona de pastos, suelos de gran fertilidad con residuos arcillosos generados por la disolución del carbonato de calcio.
Un poco antes de tropezarnos con la Casa de Don Pablo, señalada en el mapa, vemos como el sendero GR 101.1 se desvía a la izquierda con dirección a Caldoveiro. En este punto de separación existe un interesante panel informativo de esta histórica ruta.
La estrecha y cómoda carretera circula paralela al reguero de Vega Prao, que junto con los regueros Vega Muria y Las Llongas conducen sus aguas hacia la cavidad de Piedrallonga. La senda poco a poco va girando hacia la derecha, cerrando este monumental espacio natural.
En este último tramo, poco antes de atisbar de nuevo la Ermita de Santa Ana, lugar de inicio de esta ruta circular, tenemos la posibilidad de caminar a través de un sendero paralelo a la carretera siguiendo las señales del PR AS-72.
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